Ramona, nació hace casi un siglo, con una rara enfermedad. Nunca le creció el pelo. Desde pequeña soñó con una cabellera larga y abundante. Imaginaba que se hacía largas trenzas, pero solo quedaba en sueños. En uno de sus paseos por el parque, un niño se le acercó, le dio unas flores y le habló al oído.
Ramona se fue a su casa y allí le pidió a su nieta que hiciera una infusión con las flores. Con ella, se lavó la cabeza.
A los tres días, le había crecido pelo. Los médicos que la atendían, preguntaron, que tratamiento nuevo hacía, que tan buen resultado había dado.
Ramona les contó de las flores; enseguida quisieron verlas.
Les trajo una de las flores, nadie la conocía.
Al analizarla, constataron que esa especie, era nueva y en la tierra no existía.
Creo que de la Naturaleza se sacan todas las soluciones, luego ya le agregan la química, que igual te sienta bien o mal, pero como dice el dicho, la Naturaleza es muy sabia, más que el hombre...
ResponderEliminarMuy bonita historia.
Un beso.
Querida Yeruti:
ResponderEliminarHermosa historia nos traes llena de esperanza, donde la protagonista principal, Ramona a pesar de sus años mantiene la fe y no duda en hacer lo que al oído le dicta ese niño y así poder ver cumplidos sus deseos de toda la vida.-
Me gusta tu historia-mensaje.-
Recibe mi cordial besopoeta amigo, Antonio